Las 132 personas a bordo del Boeing 737-800 que se estrelló el lunes último en el sur de China murieron, según anunció la televisión pública de ese país CCTV.

"Los 123 pasajeros y nueve tripulantes del vuelo MU5735 de China Eastern murieron a bordo el 21 de marzo", dijo el director general adjunto de la Administración de Aviación Civil, Hu Zhenjiang, en una conferencia de prensa.

Hu Zhenjiang precisó que "ciento veinte víctimas pudieron ser identificadas gracias a su ADN".

El avión que operaba el vuelo MU5735 se desintegró en una ladera boscosa de Wuzhou (sur), mientras volaba de Kunming (suroeste) hacia Cantón (sur).

Una de las dos cajas negras de la aeronave, que debió grabar las conversaciones en la cabina del piloto, fue hallada el miércoles y se envió a Pekín para su análisis.

Los equipos de rescate están buscando la segunda caja negra, que contiene datos del vuelo como la velocidad, la altitud y el rumbo seguido, que podría determinar qué hizo que el avión cayera varios miles de metros en pocos minutos.

Drones, equipos de rescate y cámaras térmicas fueron movilizados en China en el sitio del accidente cerca de la ciudad de Wuzhu, en la provincia de Guangxi, y decenas de familiares de las víctimas estaban esperando el resultado de esta investigación, según informó la agencia de noticias AFP.

Las esperanzas eran escasas ya que el aparato había caído violentamente antes de incendiarse, por lo que partes del avión y objetos pertenecientes a los pasajeros fueron esparcidos en una amplia zona.

Bomberos, soldados, médicos, funcionarios de la aviación civil y voluntarios realizaron tareas de rescate durante los últimos días en la zona donde se estrelló el avión en condiciones muy difíciles debido al terreno escarpado y cubierto de barro por las precipitaciones.

El de China Eastern fue el peor accidente aéreo desde 1994 en el país asiático, donde la seguridad aérea está considerada muy buena por los expertos.

FUENTE: Télam.