Caso Chocobar: "Fue una semana muy difícil para toda la familia"

Luego de aquellos días con la desaparición de Marcela Chocobar, sin dudas ésta fue una semana muy difícil para la familia de la joven trans, ya que con el inicio del juicio que investiga la responsabilidad de los detenidos por el crimen, comienzan a conocerse detalles sobre lo que habría ocurrido aquella fatídica madrugada, y el grado de participación de quienes habrían estado detrás del asesinato.

Judith Chocobar, una de las hermanas de Marcela narró lo difícil que fue para la familia "revivir por lo que habría pasado nuestra hermana". En diálogo con el programa radial EL MEDIADOR que se emite por FM UNO 91.7 Mhz. Radio Río Gallegos, detalló cómo fue la inspección ocular "quedó en claro que lo dicho por Biott sobre el recorrido, no quedó muy claro. Para nosotros está claro que el San Benito es el lugar donde él la dejó,  la mato y la descuartizó. El en su quiebre de llanto, admite que la dejó ahí que la mató y todo lo demás, pero el recorrido no es el mismo".

"En el recorrido, esta persona estaba perdida. Llegamos a la esquina de la iglesia y no recordaba cuál era el camino. Tuvimos que esperar porque no recordaba. No recordar es una parte de tu memoria que te está negando algo. Esta persona siempre va a tratar de negar todo" dijo Judith, que agregó "terminamos el recorrido en un lugar que estaba lleno de casas, con gente viviendo allí. A esas horas alguien podría haber visto algo. Nosotros no creemos lo que dice, para nosotras fue él".

Sobre el testimonio de su ex pareja en el juicio y el regalo de una billetera que le habría hecho Biott, recordó "dijimos desde los primeros días que faltaba en el departamento de mi hermana una carterita, y es la descripción tal cual de la billetera que le faltaba a Marcela".

Judith lamentó que Adrián Fioramonti esté libre (fue absuelto por la Justicia en la etapa de Instrucción) porque aseguró "para nosotras él sabe" y aseguró que fue una pieza "clave" del ocultamiento de los hechos.

"Verlo hoy a Fiorimonti que no estaba sentado como imputado, fue muy doloroso. Escuchar el audio que hablaba como si nada, que no les importaba lo que había pasado. El es el primero que auxilia a Biott ese mismo día, cuando lo ve golpeado y con sangre. Lo lleva hasta la cabaña y empiezan a armar la coartada".

"Y después el otro testigo, Lucas Moreno que es amigo de la familia Fiorimonti dice que Adrián le comento que Biott había matado a un travesti. Nunca se acercaron en 7 meses de búsqueda, y sabemos que Fiorimonti era la movilidad de ellos. Cómo una persona puede ayudar en algo así" se preguntó la hermana de Marcela.

"Yo estoy cargada de dolor y de bronca" reconoció Judith. Sobre cómo fue para la familia ver a los acusados en el banquillo de los acusados dijo "Arzolini tiene siempre la mirada fija hacia nosotras. Biott también nos ha mirado muy fijo. Yo por mi parte los miro y después cuando mi hermana dio su testimonio, ellos se quebraron, se pusieron a llorar, no la miraron y bajaron la cabeza y lloraban".

"Estos tres días fueron dolorosos. El primer día el impacto de verlos a ellos sentados ahí. El segundo día fue más consolador porque el fiscal pudo ampliar la calificación, que es algo que siempre hemos peleado. Y ayer ver a Fiormonti sentado ahí fue terrible y enterarnos por boca de él que la mujer de Lucas Moreno el testigo anterior, era amiga de la doctora Ávalos, nuestra primera abogada nos dio mucha bronca. Nuestra abogada le pasaba información a la señora de Moreno y le contaba a él lo que estaba pasando en toda la investigación y a nosotros nos negaba siempre la información, nos decía que era mejor que no supiéramos. Enterarse que tu propia abogada estaba pasando información a una persona que hoy podría estar imputada, es terrible".