La Justicia Federal de Catamarca inició una investigación al detectar que un hombre vendía puntas de flechas, boleadoras y otras piezas de arqueología. El sujeto explicó que se las mandaba su hermano, que trabaja en los yacimientos petroleros y que actualmente vive en Pico Truncado. El hombre dijo que desconocía que eso estaba prohibido y entregó todas las piezas, aunque 

Se trata de unas 90 piezas arqueológicas que se encontraban a la venta en la ciudad de Belén, provincia de Catamarca, a través de las redes sociales, por lo que intervino el Director de Antropología de Catamarca, Ezequiel Fonseca en conjunto con la Fiscal de Belén, Dra. Marina Villagra. El pasado domingo 25 en horas de la mañana se realizo el respectivo decomiso de las piezas arqueológicas quedando en resguardo en el Museo Regional de Pico Truncado.

El hecho tuvo su génesis en la ciudad de Belén, cuando referentes de una oficina de Patrimonio Arqueológico radicaron una denuncia ante la Fiscalía Federal de esa circunscripción, anoticiando que existía a la venta a través de la red social Facebook puntas de flechas, raspadores, cuchillos de piedra y boleadoras, entre otras reliquias históricas de pueblos originarios de la Patagonia.

Ante ello la policía catamarqueña ubicó a la persona que ofrecía los elementos, quien manifestó que se vendían de buena fe y que todas las piezas se encontraban en la casa de un hermano que reside en Pico Truncado. La DDI de Pico Truncado y el personal de esta dependencia, a cargo de la subcomisario Dalila López Moreno, ubicó al hombre de 36 años quien fue notificado que, por disposición de la Fiscalía Federal de Catamarca, se encontraba involucrado en una situación procesal relacionada con la Ley Nacional Nro. 25.743 por la que se prohíbe el tráfico ilícito de bienes culturales.

Por su trabajo en el ámbito petrolero, el hombre explicó que las piezas las encontró en cercanías del yacimiento El Huemul, distante unos 15 km. de Pico Truncado.

En diálogo con el programa radial EL MEDIADOR, Carla García Almazán titular de la Dirección de Patrimonio Cultural de Santa Cruz detalló "el viernes a la noche se pusieron en comunicación con nosotros y se avanzó con las primeras medidas" y agregó "ya estaban vendidas a un comprador en Londres que ya había acordado su adquisición".

"Por suerte pudimos evitar esta comercialización pero por poco se pierde este material" señaló García Almazán que confirmó "por suerte ya están las 90 piezas en poder Museo Regional de Pico Truncado".

García Almazán comentó que las piezas habían sido vendidas "a un muy buen valor" y admitió que "hay un mercado negro que continúa operando". "La ley contra el tráfico ilícito de los bienes de patrimonio busca evitar este tipo de operaciones ilegales", señaló.